Noches de Luna llena

Las lágrimas me invanden de nuevo,
la melalncolía se apodera de mí,
y la tristeza me ha vuelto a robar el alma.


Entendí que a veces nada volverá a ser igual,
que nuevamente tendré que caminar sola,
y que está ausencía tiene nombre propio.


Hoy me desperté con la mente puesta en ti,
comprendí que me haces mucha falta,
y que jamás dejaré de quererte.


Sé que el cielo seguirá gris durante una temporada,
que el reloj ya no marcará las horas,
y en las noches de Luna llena te escribiré poesías.


La vida sigue para los 2,
pero yo me siento tan vacía,
tan risueña,
que guardaré en ese baul los besos que nunca te daré,
y las palabras que jamás te surruraré al oido.